¿Espiritismo sin Kardec?
A las puertas del siglo XXI resulta complicado observar cómo el movimiento espírita pretende hacer espiritismo luego de haber olvidado, de haber modificado y tergiversado el trabajo de Allan Kardec. Luego de 154 años de la desencarnacion del profesor Rivail, es muy frecuente encontrar literatura denominada espírita en la que, en muy pocos casos, de Kardec solo quedan imágenes en carátulas sensacionalistas y publicitarias.
La filosofía espírita cuenta con un método, con objeto de estudio, posee principios o fundamentos imposibles de apartar si intentamos practicarla; he aquí la causa de tan frecuentes errores. Ante semejante panorama nos preguntamos:
¿Será que se logró actualmente practicar, divulgar, estudiar Espiritismo dejando a un lado los conceptos sistematizados por por Denisard Rivail? ¿Será que existe espiritismo sin Kardec?
Consideramos que: volver a Kardec, estudiar a Kardec por Kardec, educar a la masa de adeptos al Espiritismo sobre la necesidad de practicar esta filosofía partiendo de sus bases son temas urgentes y de necesario desarrollo pues de esta y muchas otras formas adoptaríamos medidas esenciales ante un movimiento que ha dejado perder la identidad de la doctrina que supuestamente practica, que supuestamente divulga. Medida indispensable ante un movimiento que se ha confundido entre un mar de opiniones personales, desvirtuado por olas de cifras en ventas de libros y revistas, equivocado en la exaltación de hombres y mujeres que no han sido más que imperfectos instrumentos mediúmnicos como lo son todos los otros. Estimados hermanos: allí está la obra, de aquel hombre firme en sus determinaciones, allí está la guía lógica y razonada, las bases que necesitamos desarrollar. El punto de partida de un destino lleno de libertad. ¡Usémosla!
Caminemos juntos, y rescatemos finalmente, de una vez y por todas, de forma definitiva El legado de Kardec sin el que no existe Espiritismo posible.