El espiritismo y el mundo de la regeneración: ¿cómo llegaremos allí?

Hoje estive “filosofando” sobre esse assunto, e cheguei nas seguintes ideias que, destaco, são baseadas na minha forma de ver o tema e no conhecimento que tenho do Espiritismo – o que pode não refletir a mais completa realidade. A seguir, estão expostas as minhas considerações:

Reflexionemos: la modificación no viene de arriba abajo, como imposición, sino de abajo arriba, del individuo a la sociedad, como elección. Por tanto, el planeta sólo será transformado por el cambio de sus habitantes. Y cuando hablamos de regeneración, ¿qué es un Espíritu que se regenera a sí mismo, dejando de pasar por pruebas y expiaciones? A mi entender, es el Espíritu el que pasa a mirar dentro de sí mismo, pasando de proyectar vidas que sólo pretenden traer “sufrimientos reparadores”, a proyectar vidas que les den más oportunidades de aprender a sofocar sus imperfecciones. ¿Y cómo sucede esto? Sólo por voluntad, alimentada por la razón. Por lo tanto, según tengo entendido, son precisamente los conocimientos reforzados por el Espiritismo los que nos permitirán conquistar un nuevo “ambiente” terrestre.

Enquanto os Espíritos continuarem agrilhoados às velhas concepções aprisionantes da consciência, continuarão errando e, por uma errada concepção de pecado e castigo, continuarão buscando expiar os erros, através do sofrimento material, apenas, aplicando muitas vezes a si mesmo a “lei de Talião” - ojo por ojo diente por diente. Sin embargo, en la medida en que entiendan que lo que realmente necesitan es fortalecerse a través del aprendizaje y la razón, en contacto con conocimientos valiosos, para hacer frente a sus imperfecciones, a mi modo de ver, planificarán más sabiamente sus vidas.

Después de todo, ¿qué causa más sufrimiento: el dolor físico, que termina con la muerte, o el dolor moral, que continúa hasta que se resuelve el factor que lo provocó? ¿No es así como actuamos aquí? Cuando cometemos un error, muchas veces queremos ser castigados para aliviar nuestra conciencia, de modo que queremos dejar de lado el verdadero problema, que es nuestra imperfección y el sufrimiento moral que se origina en ella, debido a los errores. El individuo más maduro, en cambio, sabe que el castigo no lo resuelve, y busca enfrentarse a sus propios problemas, que le hicieron mal.

Por ejemplo: en aquel caso del Asesino Lemaire (RE – marzo de 1858) sabía que tenía que lidiar con sus imperfecciones. ¿Cómo pensaste en hacer esto? Él planeó nacer en medio del crimen, pero fracasó en su intento, ya que el entorno era más fuerte que él, quien todavía no tenía una voluntad y una razón mucho más fuertes. Cuando fracasó en su intento, fue uno más para sembrar la criminalidad, aliando a otros espíritus a sus intenciones. ¿Qué pasa si - qué pasa si! – ¿Habría planeado él, más conscientemente, una vida diferente? ¿Qué pasaría si, en lugar de someterse al ambiente del crimen, para luchar con sus pasiones, hubiera elegido una familia firme y amable, que le brindara una mejor educación y lo pusiera en contacto con contenidos que pudieran ayudarlo a fortalecer su voluntad? para superar tus imperfecciones, a través de la razón? Quizás había logrado superar muchas de sus imperfecciones, además de dejar de ser uno de los criminales.

¿No es eso, como un entendimiento general, generar mejores decisiones, bueno para el planeta? ¿No causaría un gran cambio en la sociedad? Pienso que sí. Pero esto requiere, en primer plano, que el Espíritu se enfrente a sí mismo: que se coloque bajo una perspectiva crítica y que se enfrente a sus propios “demonios”. Ahora, en una sociedad que se empeña en creer, porque es más fácil, en la imposición de los castigos divinos, vemos cuán lejos estamos aún de esta nueva era en este planeta... , desarrollamos nuestras virtudes y buscamos elevarnos, en el bien, para que podamos conquistar la posibilidad de encarnar en mundos más felices.

Quem sabe….

Finalizo com Kardec, em A Gênese (4a edição, original – o trecho foi eliminado en la 5ª edición, que muchos dicen que no ha sido manipulada):

Decir que la humanidad está madura para la regeneración no significa que todos los individuos estén al mismo nivel, pero muchos tienen, por intuición, el germen de nuevas ideas que las circunstancias traerán consigo. Entonces demostrarán estar más avanzados de lo que uno podría suponer, y seguirán ansiosamente el ejemplo de la mayoría. Hay, sin embargo, quienes son esencialmente refractarios a estas ideas, incluso entre los más inteligentes, y quienes ciertamente no las aceptarán, al menos en esta vida; en algunos casos, de buena fe, por convicción; otros por interés. Son aquellos cuyos intereses materiales están ligados a la coyuntura actual y que no están lo suficientemente avanzados como para renunciar a ellos, ya que el bien general importa menos que su bien personal, son aprensivos ante el menor movimiento de reforma. La verdad es para ellos un tema secundario, o mejor dicho, la verdad para algunas personas radica enteramente en aquello que no les causa ningún problema. Todas las ideas progresistas son, desde su punto de vista, ideas subversivas, y por eso les tienen un odio implacable y les hacen la guerra obstinadamente. Son lo bastante inteligentes para ver en el Espiritismo una ayuda para las ideas progresistas y los elementos de transformación que temen y, por no sentirse a la altura, se empeñan en destruirlo.. Si lo consideraran inútil y sin importancia, no se preocuparían por él. Ya lo hemos dicho en otra parte: “Cuanto más grandiosa es una idea, más enemigos encuentra, y su importancia puede medirse por la violencia de los ataques de los que es objeto”.

Kardec, A Gênese, 4a Edição – FEAL